"NO HAY MALAS EMPRESAS, LO QUE HAY ES MALOS EMPRESARIOS"
Cualquiera
podría pensar que la frase anterior del empresario peruano Walter Piazza no es
cierta y respeto mucho su opinión amable lector. Sin embargo, permítame, con
todo respeto darle un ejemplo: ¿Alguna vez ha conocido un negocio o empresa que
estaban vendiendo por “motivo de viaje”? Si averigua un poco más sobre los
verdaderos motivos por los cuales la están vendiendo, se dará cuenta que el
actual propietario simplemente no sabe que hacer con ella y esta al borde de la
quiebra; el mundo se le volvió un pañuelo y simplemente no sabe que hacer.
Es entonces cuando se “le aparece la virgen” y llega alguien que, aprovechando la oportunidad, compra el negocio. Tiempo después el antiguo propietario se da cuenta que, la que fue su empresa, hoy es un prospero negocio en constante crecimiento. ¿Qué paso? Simple y llanamente que la desesperación causada por una inminente quiebra no lo dejo pensar con claridad y tomó decisiones apresuradas. Llego un administrador que vio en la crisis una gran oportunidad y saco adelante la empresa.
En mi libro “¿Qué hacer?” doy una serie de ejemplos que ilustran mejor esta realidad. Sin embargo, como la idea aquí no es formar polémica al respecto sino más bien dar algunas ideas que le llevaran a mejorar la administración no solo de su negocio, sino la de su propia vida, siendo esta su principal empresa, lo invito a que juntos veamos como administrar con sentido común...
Es entonces cuando se “le aparece la virgen” y llega alguien que, aprovechando la oportunidad, compra el negocio. Tiempo después el antiguo propietario se da cuenta que, la que fue su empresa, hoy es un prospero negocio en constante crecimiento. ¿Qué paso? Simple y llanamente que la desesperación causada por una inminente quiebra no lo dejo pensar con claridad y tomó decisiones apresuradas. Llego un administrador que vio en la crisis una gran oportunidad y saco adelante la empresa.
En mi libro “¿Qué hacer?” doy una serie de ejemplos que ilustran mejor esta realidad. Sin embargo, como la idea aquí no es formar polémica al respecto sino más bien dar algunas ideas que le llevaran a mejorar la administración no solo de su negocio, sino la de su propia vida, siendo esta su principal empresa, lo invito a que juntos veamos como administrar con sentido común...
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