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miércoles, 21 de agosto de 2024

Maestro o instructor.



Fueron varios los comentarios sobre mi blog sobre el “Oscurantismo Tecnológico”, quisiera compartirlos todos con ustedes, la gran mayoría muy positivos y que están de acuerdo con el artículo.

Sin embargo, quiero trascribir el comentario del profesor Jorge Rivas, docente de la ciudad de Bogotá, Colombia, quien manifiesta lo siguiente “Muy interesante su blog sobre tecnología señor Restrepo, pero quisiera verlo a usted frente a un grupo de 42 adolescentes y varios de ellos chateando mientras yo trato de dictarles una clase de matemáticas. Con todo respeto, señor Restrepo, pero pienso que escribir es muy fácil, otra cosa es lidiar con los jóvenes de ahora que piensan que saben más que sus profesores”

No debe ser fácil profesor Jorge “lidiar” con jóvenes adolescentes y más con grupos antipedagógicos de 42 estudiantes. Si difícilmente se puede atender a uno ¿Qué diremos de tratar de controlar a 42? Pero bueno, esa es la situación de nuestro amado país Colombia, donde el modelo educativo deja mucho que desear y me atrevería a decir que de la mayoría de los países del mundo, de ahí que los resultados saltan a la vista. Cárceles atiborradas de delincuentes, la mayoría de los cuales mínimo saben leer y escribir y muchos de ellos hasta han salido de las más prestigiosas universidades.

Una frase atribuida al científico Albert Einstein dice que “es de tontos esperar resultados diferentes y continuar haciendo lo mismo”. Es un hecho que los sistemas educativos de la mayoría de los países del mundo están desactualizados por no decir qué obsoletos. Pero bueno, mientras la capacitación sea un excelente negocio, difícilmente van a cambiar porque prima el bien particular que el bien común.

Ahora si permítame profesor Jorge responder a su comentario y con él, varios otros que me hicieron, palabras más, palabras menos expresando inconformidad con mi artículo, los cuales agradezco.

También yo fui docente por varios años cuando era un poco más joven. Claro que en ese tiempo no teníamos las dificultades que tienen ustedes los docentes actuales con la tecnología y particularmente con los teléfonos celulares. Sin embargo, los muchachos siempre han sido inquietos y han tenido cualquier cantidad de pretextos o distractores para no atender a clase. Así es profe, que nada de nervios y por favor continúe en su loable labor de tratar que sus estudiantes aprendan algo de lo que usted enseña.

Una cosa es ser maestro y otra muy diferente ser instructor, maestro es aquel que llueva, truene o relampaguee, está compartiendo con sus estudiantes lo poco o lo mucho que sabe y los ve a ellos como si fueran sus hijos, dos películas que especialmente recomiendo a los docentes cuando les dicto mis conferencias son, el profe, de Mario Moreno Cantinflas y la película india Taare Zameen Par. En ellas se puede apreciar lo que es un verdadero maestro.

Instructor, en cambio, es aquel que llego a la docencia por carambola, porque no encontró más que hacer o porque no encontró trabajo haciendo otra cosa y ve a sus estudiantes como una carga, como un karma, como personas que representan para ellos una fuente de ingresos y el día que no les llega el pago a tiempo simplemente suspenden labores y que cada cual se defienda como pueda. Infortunadamente, las instituciones educativas de todos los niveles están llenas de instructores y de muy pocos maestros.

Tal y como lo exprese en mi artículo anterior, en vez de los docentes estar peleando con los muchachos para que no utilicen los celulares, enséñenles a utilizarlos adecuadamente y en cuanto a que los muchachos se creen saber más que los profesores, es lo más probable porque los jóvenes actualmente cuentan con la información en tiempo real, más se demora un científico en patentar un invento que los muchachos saber de qué se trata, como funciona y como mejorarlo.

Cada día algunos títulos académicos como son los que tienen que ver con las TIC son menos importantes, como lo expresaba en un artículo anterior, hay niños y adolescentes que le dan cátedra de tecnología a adultos que salen de las más prestigiosas universidades a buscar empleo cuando estos muchachos, en vez de buscar empleo, lo están generando. De ahí que las grandes multinacionales ya no les interesa tanto contratar a profesionales con cualquier cantidad de títulos universitarios. Esas empresas están contratando personal que demuestre lo que saben hacer con lo que saben hacer.

Así es profesor Jorge y todos los demás docentes que me escribieron, que les sugiero que, en vez de seguir dictando clase como se hacía hace doscientos o trescientos años, se conviertan en acompañantes, en coordinadores, en facilitadores, permitiendo que sus estudiantes utilicen al máximo esos bichos llamados celulares o computadores para investigar y estudiar en tiempo real lo que ellos van a necesitar en el futuro inmediato o en las profesiones u oficios que quieren desempeñar. Recuerden lo que decía el humanista neerlandés Erasmo de Rotterdam “Es de tontos aprender, lo que luego hay que olvidar”.


  

domingo, 30 de junio de 2024

Dar sin que nos pidan.


"Bueno es dar cuando nos piden; pero mejor es dar sin que nos pidan, como buenos entendedores" (Khalil Gibran) 

Siempre se ha dicho que para un buen entendedor con pocas palabras basta.   

Hace poco me encontré con un “amigo” al cual hacía algún no veía y quien aparentemente se alegró al verme. La verdad es que no pudo evitar el encuentro ya que estaba sentado en su flamante vehículo, al parecer esperando a alguien. En pocos minutos me contó de las empresas que tenía, de los estudios que había realizado y de los que estaba realizando. Yo simplemente lo deje que hablara, en ningún momento me pregunto algo sobre mi o sobre mi familia, siempre hablaba de él y de lo exitoso que era. Me dijo que se había enterado de mi revés económico y lo mucho que lo lamentaba. Sin embargo no dijo nada sobre querer ayudarme pese a que acababa de contarme de las empresas que tenía y de lo bien económicamente que estaba. 

Cuando se marchó, no sin antes despedirse de mí con una enigmática sonrisa, me quede pensando lo que hace el dinero en las personas, a muchas de las cuales vuelve insensibles, indiferentes, distantes y son de las que lo miran a uno por encima del hombro o a veces ni eso. Sabía que mi “amigo” hubiera podido hacer mucho por mí pues conocía su gran poder económico. ¿Qué habría pasado si le hubiera pedido ayuda? Posiblemente me hubiera ayudado, sin embargo, la pregunta es ¿A qué buen amigo es necesario pedirle ayuda sabiendo nuestras dificultades? 

A usted que está leyendo este articulo quiero hacerle una pregunta ¿A quién ha ayudado hoy sin que esa persona se lo haya solicitado? Dirá usted que no tiene económicamente nada para dar, lo cual puede ser cierto. Pero, ¿Qué tal si comienza a dar de lo que usted tiene en abundancia? ¿Sabía usted que el mejor regalo es aquel que no pueda comprar con dinero? ¿Qué tal si hoy, sin decir absolutamente nada, le da un abrazo sincero a esa persona con la cual usted convive, labora o permanece la mayor parte del tiempo? Le anticipo que debe estar preparado(a) para una reacción no siempre muy agradable, porque es muy probable le pregunten que le está pasando, si está consumiendo alguna droga de esas raras, si tiene fiebre o si piensa que se va a morir y ya se está despidiendo, ya que por lo general, no estamos acostumbrados a ese tipo de manifestaciones. 

Recuerde que hay personas tan pobres tan pobres que lo único que tienen es dinero. Dar sin necesidad de que nos pidan es quizás la mayor obra de misericordia. Le sugiero volver a leer un artículo que publique recientemente (http://onofrerestrepo.blogspot.com.co/2015/08/los-pobres-vergonzantes.html) en el cual escribo al respecto.

Siempre se ha dicho que el dinero no hace la felicidad, idea que respeto pero no comparto, ya que podemos hacer felices a muchas personas con dinero o sino que lo digan las personas que en un momento dado son favorecidas con una ayuda económica que no esperaban. Pienso que los que dicen que el dinero no es importante es porque nunca lo han tenido o no lo han sabido utilizar. Por supuesto que el dinero es importante, otra cosa es que nos fanaticemos y estemos dispuestos a hacer cualquier cosa por conseguirlo. Recordemos la frase de Voltaire cuando decía “Quien cree que el dinero lo hace todo, acaba haciendo de todo por dinero”

La Madre Teresa de Calcuta afirmaba que: "quien no vive para servir, no sirve para vivir". Reflexione sobre lo mucho que puede hacer en pro de sus semejantes. Claro que si usted es de los que interpretan mal el más grande mandamiento de "Amarás al señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con todo tu espíritu" y ese dios es el dinero, ahí si no hay nada que hacer porque no podrás practicar el segundo mandamiento de "y al prójimo como a ti mismo"

martes, 23 de abril de 2024

La venganza del Cliente.


Existen tres variables fundamentales para competir en un mercado cada vez más globalizado y tecnificado: La calidad, el precio y el servicio. Sin embargo, me atrevería a asegurar que, de las tres variables, la más importante es el servicio al cliente porque se supone que nadie va a sacar al mercado un producto o servicio de mala calidad y con un precio que no sea el justo, claro que casos se ven, donde existen productos y servicios de dudosa procedencia y calidad y con precios que no son los adecuados.

Pero bueno, supongamos que tenemos productos y servicios de buena calidad y a precios justos; nos queda entonces el servicio al cliente, el cual es la llave maestra para triunfar a nivel personal, social, profesional y empresarial. Curiosamente, aunque se sabe que esta es la principal herramienta para competir en un mercado cada vez más exigente, no siempre se aplica porque se continúa tratando al cliente como alguien que importuna con su presencia o en el peor de los casos, se califica a los clientes como clientes de primera o de segunda categoría o se prejuzgan ya sea por su apariencia, vestimenta, etc.

¿Sabía usted amable lector que cada vez son menos los clientes que se quejan? Ello se debe a que ahora lo que hacen los clientes es utilizar la poderosa herramienta de la Internet. Cuando el cliente no es bien atendido o el producto o servicio no cubre sus expectativas, de inmediato lo comenta con los contactos que tiene en WhatsApp o en las redes sociales y a su vez estos hacen lo mismo, de tal forma que el mensaje se viraliza y en pocos minutos miles de personas están enteradas de tal situación, es literalmente, la venganza del cliente.

Ahora no hay una segunda oportunidad de brindar un servicio de excelencia y mucho menos de tratar de enmendar el error porque todo se hace en tiempo real. En el mismo instante que el cliente está siendo mal atendido puede estar comentando con sus contactos lo que le está sucediendo y por lo general es lo negativo porque pocas veces se viraliza lo positivo.

La pregunta es, si los empresarios saben esto, ¿Por qué es tan común continuar viendo personas para las cuales es más importante lo que están haciendo en el celular o en el computador que prestarle toda la atención al cliente?

Afortunadamente, se está tomando conciencia de esto y en algunos lugares, más que todo en restaurantes, se instalan inhibidores que bloquean la señal para que tanto los empleados como los clientes no puedan utilizar el teléfono celular y en vez de prestarle atención a sus celulares, dialoguen. Siendo el celular el que, en cierta forma, se ha convertido en una verdadera amenaza para el correcto funcionamiento de las empresas, causándole cuantiosas pérdidas económicas.

¿Cómo contrarrestar la adicción a los computadores y celulares? Solo hay una forma, con capacitación constante. Infortunadamente, como todo tratamiento de adicciones, el proceso es lento y los resultados son a mediano y largo plazo. Algo que no se debe hacer es prohibir el uso de la tecnología, ya que todo lo prohibido es apetecido y como lo escribí en un blog anterior, evitar el uso de celulares o computadores a nivel general, es querer tapar el sol con un dedo.

Cualquiera sea su actividad o profesión, le sugiero encarecidamente que le preste la mayor atención al servicio al cliente porque este es el que paga TODOS sus gastos e inversiones. Evalúe entonces quién es su cliente, comenzando por usted mismo y responda la pregunta del millón ¿Se está y está prestando un servicio de excelencia? De su respuesta depende su triunfo o su fracaso.



sábado, 13 de enero de 2024

La diosa oportunidad



Cuenta la historia, que una de las diosas de los antiguos griegos era la diosa oportunidad, a la cual pintaban y esculpían casi calva, a excepción de un mechón de pelo que le cubría la cara. La idea era que cuando alguien viera venir a la diosa oportunidad y la lograra coger del mechón de pelo, ella le hacía realidad todos sus sueños, pero si se dejaba pasar, ya no se podía coger del pelo. 

¿Cuántos de nosotros hemos visto llegar a la diosa oportunidad y, sin embargo, la dejamos pasar? Sin temor a equivocarme, pienso que a la mayoría de los seres humanos. Se suele decir que hay tres cosas en la vida que no tienen regreso, la palabra dicha, la flecha lanzada y la oportunidad pérdida. Lo cual no es del todo cierto porque oportunidades siempre se presentarán en la vida. Solo que la mayoría de las veces las desaprovechamos o las dejamos pasar esperando una mejor. La pregunta es ¿Cuál es la mejor? Al igual que esperar encontrar al hombre o a la mujer perfecta, es muy difícil. 

Pienso que la mayoría de las oportunidades se pierden por miedo a aprovecharlas o porque simplemente no las vemos, pues, como dice el refrán, “no hay peor ciego que el que no quiere ver, ni peor sordo que el que no quiere oír”. Resulta paradójico el hecho que siempre estamos pidiendo una primera, segunda o tercera oportunidad y cuando esta se presenta, no la aprovechamos. Hay veces que ni haciéndonos un dibujo con plastilina la vemos o ¿será que solo vemos lo que queremos ver? Eso también puede ser cierto. Que las oportunidades se pierden no es del todo cierto, por lo general las aprovechan otros y los que las dejaron pasar se consuelan diciendo que, “lo que no es para uno no es para uno”, o ,“al que le van a dar le guardan”. 

Otra historia es la del hombre que todos los días sin falta le oraba a Dios. En cierta ocasión hubo una inundación en el pueblo y las aguas comenzaron a subir rápidamente. A la casa del hombre llegaron unos amigos en un bote y le dijeron que subiera a él porque de lo contrario se iba a ahogar, a lo cual el piadoso hombre replico que no era necesario porque Dios lo iba a salvar. Minutos más tarde el hombre se subió al techo de la casa y en esas pasó un helicóptero del cual le arrojaron una escalera de cuerdas para que subiera y él nuevamente se negó diciendo que Dios lo salvaría. El caso fue que el hombre al fin se ahogó y cuando llego al cielo increpo a Dios diciéndole por qué no lo había salvado de aquella inundación, siendo que él era un hombre tan piadoso. Después que el hombre se hubo desahogado con Dios, este tranquilamente le dijo que le había mandado un bote y luego un helicóptero para que se salvara y que no había querido aceptarlos, por lo tanto, la culpa que hubiera fallecido en esa inundación no era de Él. Es un hecho que papá Dios siempre nos está enviando salvavidas y nos presenta oportunidades, sin embargo, pocas veces las vemos o las aprovechamos.

Lo invito, pues, amable lector a reflexionar sobre cuál ha sido la última oportunidad que usted ha desaprovechado, a la cual ha procrastinado o dejado para otro día. Lo más probable es que hayan sido varias y le haya pesado no haberlas aprovechado. Claro que también debo solidarizarme con usted manifestando que a veces hay que decirle no a algunas “oportunidades”, ya que pueden resultar siendo un distractor para llevar a cabo nuestro proyecto de vida.

jueves, 2 de noviembre de 2023

Los seres queridos

Nadie puede negar la importancia de la familia, de los amigos, de los socios y de todas aquellas personas que son cercanas a nuestros afectos, son nuestros seres queridos. Personas que de una u otra forma influyen en nuestra vida, en nuestra formación personal y profesional, en nuestros sueños. Son parte integral de nuestro entorno, de nuestra manada, de nuestra vida. Seres por los cuales estamos dispuestos a realizar grandes sacrificios e incluso a dar nuestra vida.

Infortunadamente, también se da el caso, con más frecuencia de lo que pensamos, que se convierten en verdaderos lastres que no nos permiten avanzar e incluso, en muchas oportunidades, no solo no nos permiten avanzar, sino que nos hacen retroceder, convirtiéndose en nuestros peores verdugos. Sin embargo, no podemos concentrarnos en los pocos que nos hacen daño, sino en la multitud de personas que están dispuestas a ayudarnos, a alentarnos, a hacer realidad nuestros sueños. Curiosamente, la mayoría de las veces son personas que no son de nuestra familia y a veces ni siquiera nos conocen. Aunque, son las que más creen en nosotros.

Lo invito amable lector a hacer el siguiente ejercicio: Supongamos que usted es de una familia de clase trabajadora y que al igual que sus demás familiares vive de un modesto sueldo. Dígale a la persona con la cual usted convive y que, por lo tanto, conoce sus fortalezas y debilidades que mañana se va a comprar un vehículo de alta gama. Lo más probable es que esa persona le va a preguntar si tiene fiebre, si está consumiendo alguna droga alucinógena o en el peor de los casos si se está volviendo loco. Le va a recordar que hay necesidades apremiantes en el hogar y que, por lo tanto, no entiende cómo es que usted se va a comprar un vehículo que está más allá de sus capacidades económicas. Ese “ser querido” sabe exactamente cuáles son sus limitaciones y lo conoce muy bien. 

Sin embargo, mañana, colóquese el mejor traje y vaya a visitar un concesionario donde venden vehículos de gama alta. ¿Qué es lo primero que le pregunta el vendedor? Esa persona no lo conoce a usted, por lo tanto, no sabe que probablemente usted no tiene ni donde caerse muerto y que difícilmente podrá comprar uno de los lujosos vehículos que allí se exhiben. Ese vendedor sabe que donde menos se piensa salta la liebre y que no puede prejuzgar al cliente por su apariencia y qué casos se han visto de personas que no aparentaban mayor cosa y salieron comprando el vehículo más costoso.  De igual forma, esas personas que en un momento dado nos quieren ayudar no lo hacen por lo que aparentamos sino por lo que somos.

Lo invito amable lector a reflexionar y analizar detenidamente a las personas con las cuales usted convive, que lo rodean. Un antiguo refrán dice “dime con quién andas y te diré quién eres” el cual se complementa con otro que dice que "el que entre la miel anda, algo se le pega". A nuestro alrededor debemos tener personas que nos edifiquen, que nos animen, que a pesar de las circunstancias, por difíciles que estas sean, nos digan que podemos salir adelante. Si por algún motivo se da cuenta de que los “seres queridos” que lo rodean solo quieren verlo a usted cada vez más mal de lo que está, lo mejor es que comience a colocar distancia de por medio, por mucho que los ame. Usted es una persona que merece triunfar, que merece lo mejor de lo mejor, que nació para ser feliz.


Recuerde que todo en la vida parte de una decisión llevada a la acción, si usted sigue haciendo lo mismo no va a obtener resultados diferentes. Es necesario que si no está logrando sus objetivos cambie su modus operandi, que pase de ser una persona ordinaria y se convierta en alguien extraordinario y la mejor forma es dar lo mejor de usted, de hacer un esfuerzo extra, de luchar por sus sueños, llueva, truene o relampaguee. De insistir, persistir, resistir y nuca desistir. Nuestros “seres queridos” nunca dejarán de serlo, aunque, es su decisión si continúa haciéndoles caso a todo lo que le dicen, a frase tales como: Usted no es capaz, usted no puede hacer eso, usted no sirve para nada o que le dicen “sueñe, que eso relaja” y lo más desagradable de estas y otras frases no es la frase en sí, sino el tono burlesco con que las dicen.

miércoles, 17 de agosto de 2022

El futuro de Colombia.


¿Cuál crees Onofre que va a ser el futuro de tu país Colombia?


Hace poco hablando por Skype con un amigo alemán, que me hizo esta pregunta. Por unos momentos me quede sin saber que responderle, sin embargo le pregunte…

- ¿Cuál crees tú que pude ser? 

- No lo sé. De tu país nos llegan noticias no muy agradables que digamos, narcotráfico, corrupción, guerrilla, paramilitarismo, delincuencia común y organizada, en fin, violencia en todos los sentidos y ahora con un gobierno de izquierda.

- Esas son las noticias que les llegan a ustedes, la pregunta es ¿Qué piensan ustedes al respecto?

- No se trata de saber que pensamos sino lo que vemos en los noticieros de televisión y debo decirte Onofre que no solo es en tu país, sino en muchas partes de Latinoamérica. Nuestro gobierno por ejemplo si bien es cierto no nos prohíbe viajar a esos países, sin nos previene. 

- Lo cual es muy lamentable en verdad ya que muchos de nuestros países dependen en gran parte del turismo. En cuanto a tu pregunta y tu apreciación de mi hermoso país Colombia pienso que tienes toda la razón. Al igual que muchos países del área estamos viviendo una delicada situación, eso no quiere decir que vaya a ser así por siempre, estoy seguro que a las próximas generaciones les va a tocar vivir una situación completamente diferente a la que vivimos actualmente. No sé cuántos años, lustros o siglos pasen, pero la realidad es que el futuro de Colombia como el de muchos países de América Latina y del mundo será el mejor, siempre y cuando cambiemos radicalmente el modelo educativo y nuestra forma de pensar. 

- ¿Cómo así?

- Al respecto, tu coterráneo, el científico Albert Einstein manifestaba que “Locura es hacer lo mismo una y otra vez y esperar resultados diferentes”. Durante muchos años nos hemos estado matando entre hermanos y sin embargo poco hemos hecho al respecto. El 9 de noviembre de 1989 ustedes los alemanes se dieron cuenta que la división física que tuvieron durante casi 30 años no era lógica, no solo se reencontraron con la caída del muro sino que cambió radicalmente la forma de pensar y de actuar de ustedes logrando lo que para muchos era algo muy difícil, hacer la paz entre ustedes, hoy en día son un modelo a seguir. 

- Tienes razón, sin embargo no fue fácil. 

- Nada que valga la pena es fácil.

- ¿Qué piensas de la idea de "Paz Total" del nuevo presidente?

- Pienso Erik que es algo muy importante y la mayoría del pueblo colombiano quiere que eso de la paz total se vuelva realidad, sin embargo la verdadera paz la debemos hacer cada uno de los colombianos y es el de perdonarnos a nosotros mismos y a nuestros hermanos, mientras eso no se logre difícilmente alcanzaremos la paz tan anhelada. Si te soy sincero, pienso que mi generación y posiblemente la próxima no vera a nuestro país en paz debido a que estamos contaminados de la guerra y la violencia que por tantos años hemos sufrido. En nuestros corazones hay mucho odio, rencor, resentimiento, apatía y desconfianza, lo cual hace que cualquier proceso de paz sea mucho más difícil. La paz necesariamente debe comenzar por nosotros mismos, mientras pensemos en venganza, difícilmente la lograremos. Mientras continuemos hablando de la forma que lo hacemos de nosotros mismos, de nuestro país y que en vez de resaltar las cosas buenas, nos concentremos en las cosas malas, difícilmente viviremos en paz. 

De ahí la importancia de cambiar radicalmente nuestro sistema educativo con el fin que las próximas generaciones comiencen a pensar y actuar en forma diferente. Sé que en muchas partes del mundo los colombianos no somos bien recibidos, una fama que lamentablemente nos hemos ganado debido a las lamentables situaciones que hemos vivido, más que todo con lo relacionado con el narcotráfico. Sin embargo quiero decirte algo amigo Erik y es que los colombianos somos gente buena y que no se debe continuar tratando a un pueblo de aproximadamente cincuenta millones de personas por lo que hace el escaso uno por ciento de la población. Si realmente quieren ayudarnos a lograr la paz, deben comenzar a dejar de vernos como narcotraficantes, corruptos, guerrilleros o delincuentes, los cuales hay en todas partes del planeta. Dificultades similares o peores hay en muchos países, sin embargo, si quieren a ayudarnos a superarlas necesariamente deben comenzar a pensar y actuar en forma diferente. Sea esta pues la oportunidad para invitarte nuevamente a que visites nuestro hermoso país y tener la oportunidad de compartir contigo un delicioso café colombiano. 

- Que entre otras cosas es delicioso. Gracias por tu invitación Onofre, créeme que muy pronto lo haré.

Luego de terminar de dialogar con mi amigo Erik, me quede pensando en lo que habíamos hablado. Y es que la paz necesariamente debe nacer en el corazón de nosotros los colombianos. Si muchos países que han pasado por situaciones quizás más difíciles que las nuestras la han logrado ¿Por qué no nosotros? Lo invito a comenzar a pensar y actuar de forma diferente. A concentrarnos en lo bueno y no en lo malo que tenemos. Sera un proceso que durara muchos años, pero si queremos que las próximas generaciones disfruten de la paz que la nuestra no disfrutara plenamente, debemos comenzar a sembrar con nuestras palabras y con nuestras acciones lo que queremos que cosechen las próximas generaciones.

lunes, 7 de febrero de 2022

Tipos de Amigos


Hace poco me encontré con un articulo que quiero compartir con ustedes y que quiero dedicar a mis verdaderos amigos.

Columnista invitado: Cangrejo Perez

10 tipos de amigos que seguramente usted ha tenido

Todos hemos tenido amigos, grandes, pequeños, cansones, queridos, mala gente, fuertes, débiles, aburridores, confianzudos, y con una infinidad de características que sería imposible clasificarlos a todos dentro de un solo artículo. De esta forma me propuse la difícil tarea de clasificar los 10 principales tipos de amigos con los que nos topamos en la vida. Seguro ustedes han tenido más de uno de los que se presentan a continuación.


1. Amigo por conveniencia.

Los amigos por conveniencia son aquellos que están con usted por lo que tiene o por lo que es, son esos amigos que también llamo “Amigos sanguijuela” porque se aprovechan de los demás para obtener beneficios físicos, económicos o sociales, y a cambio ofrecen su amistad “incondicional”. Los amigos por conveniencia se caracterizan por estar siempre cuando los necesitan, pero dejan de estar cuando usted pierde esas ventajas económicas, sociales o de cualquier otro tipo que lo benefician.

2. Amigo habla damier.

Quién no ha tenido un amigo que siempre anda dando lora de lo que hace y deja de hacer, pero en el fondo usted siempre sabe que no hay que creerle ni el 10% de lo que dice. Este tipo de amigos se caracterizan por tener una imaginación y creatividad sin límites, ellos siempre hacen una infinidad de cosas que cualquier otro ser humano jamás podría hacer, y lo peor es que quieren convencer al resto que aquello que pregonan es verdad. Los amigos habla damier divierten hasta cierto punto con sus historias sacadas de la ficción que sólo existe en su cabeza, pero terminan aburriendo cuando uno comienza a darse cuenta que casi todas sus chocoaventuras son mera damier. 

3. Amigo de rumba.

Estos amigos son muy comunes, son aquellos con los que usted sólo se encuentra para ir de fiesta, se ven cada ocho, quince o veinte días. Este tipo de amigos se caracterizan por estar ausentes de Lunes a Jueves, y aparecer los Viernes para preguntar: “¿Y hoy que hay pa’ dañar este finde?”. Los amigos de rumba siempre serán buenos amigos para beber y bailar, pero rara vez se convierten en amigos confidentes, más bien es una relación de supervivencia social.

4. Amigo torero.

El amigo torero es ése que aparece por temporadas, pasan semanas, meses e incluso años sin saber de ellos, pero el día menos pensado aparecen y es como si se hubiesen ido ayer. Los amigos toreros son muy comunes sobre todo luego de la época del colegio y/o la universidad, pues cada quien comienza a hacer su vida por aparte. Los amigos toreros también son aquellos que se ennovian y se pierden, y vuelven a aparecer sólo hasta que su pareja los deja con el rabo entre las patas y vuelven para que usted los ayude a pasar la tusa. 

5. Amigo McGyver.

El amigo McGyver es ése que todo lo arregla de una forma tan rápida y efectiva que siempre sorprende a los demás, es ése amigo que siempre le ayudará a solucionar cualquier problema que tenga, desde abrir una puerta, prestar plata, hasta curar un mal de amores. El amigo McGyver es indispensable para cualquier ser humano, porque son ellos los que lo sacan a de cuanto problema se aparece.

6. Amigo bipolar.

Tal vez uno de los tipos de amigos más aburridores de todos, usted nunca sabrá cómo tratar al amigo bipolar porque puede cambiar de genio en cualquier segundo; un día amanecen como si hubiesen acabado de ganar la lotería, y al siguiente día amanecen como si se hubiesen divorciado. Para tratar a los amigos bipolares es necesario tener mucha paciencia, y sobre todo mucho valor para mantener la compostura a la hora de soportar sus cambios de estado de ánimo.

7. Amigo descarado.

Los amigos descarados son aquellos que sólo piensan en su bienestar antes que el bienestar de sus amigos, son aquellos que se aprovechan de las personas que los rodean para hacer y deshacer. A ellos nunca les importará que los demás estén bien, y pasarán por encima de quien sea necesario para lograr lo que quieren.

8. Amigo burletero.

Los amigos burleteros son aquellos que se valen de la desgracia o defectos ajenos, son ésos que se aprovechan de los errores y defectos de los demás para dejar mal al resto e intentar sobresalir. Los burleteros siempre tendrán una doble intención detrás de sus actos, nunca serán lo suficientemente sinceros y sabios para afrontar sus falencias, y se valen de dejar por debajo al resto para de una u otra forma resaltar ante el mundo.

9. Amigo ñoño.

Los amigos ñoños son aquellos que siempre estarán en contra de la diversión, son esos que siempre encuentran una excusa lo suficientemente aburrida como para alejarse de los planes divertidos.

10. Amigo de verdad.

Los amigos de verdad son esos que rara vez existen, son esos especímenes que están en vía de extinción, que están en las buenas y en las malas, que no desaparecen de un día para otro y que siempre ofrecerán un hombro como soporte ante los problemas de las personas que en realidad aprecian.

Moraleja Cangrejiana: Los amigos se cuentan con los dedos de una mano, si usted llega a encontrar uno, entonces no lo deje ir, tal vez sea uno de los pocos que aún existen en este planeta.

Escribiendo desde lo más profundo (del mar) Cangrejo Pérez"

miércoles, 2 de febrero de 2022

Corrupción

Corrupto: Según la Real Academia de la Lengua Española se trata de una “sustancia o cuerpo que está corrompido o descompuesto” Y todos sabemos lo que eso significa. Los olores nauseabundos que despiden los cuerpos en descomposición son al extremo desagradables, así como desagradable es lo que genera la corrupción. La pregunta es ¿Quién en algún momento no se ha dejado corromper por algo o por alguien? Y es que cuando se pierden principios y valores cualquier cosa puede suceder. No hay delitos pequeños o grandes, simplemente hay delitos. Mi padre solía decir que lo que no es de uno, no es de uno y a alguien debe pertenecer por lo tanto es necesario devolverlo. 

Durante algún tiempo usted amable lector ha seguido mis artículos, lo cual le agradezco. Sin embargo permítame hacerle con todo respeto una pregunta ¿le ha servido de algo lo que le he transmitido por medio de este blog? De ser así, me alegro, esa ha sido la idea. Hacerlo reflexionar sobre las dificultades que tenemos los seres humanos. Hoy por ejemplo el tema central de mi blog es la corrupción, un tema tan espinoso como son el sexo, la política o la religión. Sin embargo, aun así, es necesario hablar un poco sobre algo tan desagradable, una práctica que hace que miles y quizás millones de personas alrededor del mundo hagan sufrir al resto de la humanidad situaciones al extremo difíciles debido a que fueron vulnerados sus derechos.

La pregunta es ¿Por qué lo hacen? En la mayoría de los casos las personas corruptas lo hacen por ganar poder político o religioso, fama o fortuna. Y es que como decía el sabio Voltaire “El que piensa que el dinero lo hace todo, está dispuesto a hacer todo por dinero”. Millones de vidas humanas han sido desperdiciadas debido al accionar de los corruptos. Lo más increíble de todo es que igualmente la mayoría de los corruptos, mínimo saben leer y escribir y muchos han salido de las más prestigiosas universidades del mundo ostentando títulos y diplomas que acreditan los altos estudios que han realizado. Dicho de otra forma son personas muy bien capacitadas, pero que de educación no saben absolutamente nada. 

Con esto queda demostrado una vez más que el modelo educativo en la mayoría de los países está equivocado. El que durante cientos de años y yo diría que milenios nos hemos estado matando entre hermanos y destruyendo el escaso medio ambiente que nos queda, poniendo en serio riesgo el futuro del planeta tierra y por ende todo lo que hay en él, es una muestra inequívoca que las instrucciones que hemos recibido en las diferentes academias no son las adecuadas. Se preguntará usted amable lector si no hay nada que hacer y la respuesta es que hay mucho por hacer, es más, esta todo por hacer. El darnos cuenta que tenemos un problema equivale al 50% de la solución del mismo, el otro 50% es tomar la decisión de realizar acciones que conduzcan a salir de esas difíciles situaciones.

Siempre he pensado que no hay que inventar lo que ya está inventado y funciona, sino mejorarlo e innovar. El ejercicio es supremamente sencillo y tal vez por serlo parezca que algo no puede ser tan fácil ya que lo complicado es lo que más nos llama la atención. Ingrese usted al fantástico mundo de la Internet y utilizando uno de los buscadores averigüe cuales son los países menos corruptos del planeta. Se dará cuenta que si en algunos países los altos magistrados, políticos, religiosos, ejecutivos, empresarios y personas muy adineradas van a pie, en transporte público o en bicicleta a sus sitios de trabajo sin necesidad de ir custodiados o en vehículos blindados, es porque algo está pasando en esos países y no quiero mencionarlos con nombre propio porque será una tarea que usted debe realizar, si es que en realidad quiere saber que se está haciendo en muchas partes del planeta en contra de la corrupción en todos los niveles y estamentos.

Lo(a) invito pues a reflexionar un poco en que tan corruptos somos, en que aspectos de nuestra vida nos hemos dejado corromper ya sea por el dinero, por los vicios, por ideologías o filosofías equivocadas. Que pensemos en que nos hemos fanatizado dejándonos llevar como corderos al matadero. Recordemos que en condiciones normales, los únicos responsables de lo que nos pasa somos nosotros mismos. En la medida que nos respetemos y respetemos a todo y a todos, las situaciones, por difíciles que sean, comenzaran a cambiar. De esta forma las futuras generaciones no nos verán como los culpables de lo que a ellas les pase puesto que nuestras dificultades son el resultado de las decisiones que tomaron nuestros antepasados.

Como decía el sabio Albert Einstein “Es de tontos esperar que las cosas cambien y seguir haciendo lo mismo”.

miércoles, 8 de diciembre de 2021

Servicio al Cliente II: Actitud de servicio

En la entrega anterior les comentaba una de las experiencias que solo me pasan a mí. Como siempre mis amables lectores me escribieron algunos mensajes bien interesantes a mi correo electrónico. A todos ellos, gracias por seguirme. 

Continuando con el espinoso tema de servicio al cliente quiero compartir con ustedes algo bien interesante: El sistema metro de mi ciudad Medellín tiene un eslogan muy interesante que dice “Metro, calidad de vida”. Según me han comentado amigos que han tenido la oportunidad de conocer muchos sistemas de transporte masivo en varias ciudades del mundo, el metro de Medellín está ubicado entre uno de los mejores, no solo por el eficiente servicio que presta sino por el aseo, la seguridad y la atención que le brindan los funcionarios a los pasajeros. 

Como siempre lo he recalcado en mis libros. No hay que inventar lo que ya está inventado y funciona, lo que hay que hacer es mejorarlo. Miles de libros y muchas películas se han escrito y filmado sobre el tema de cómo brindar un servicio de excelencia. Verdaderos gurús han surgido en los últimos años expertos en tan delicado tema. Personas que cobran miles de dólares por sus servicios y a los cuales hay que agendarlos con meses y a veces años de anticipación debido a que se mantienen tan supremamente ocupados que no les queda tiempo de nada. Algunos incluso se dan el lujo de seleccionar a sus clientes y si no les pagan las astronómicas cifras que cobran, pues simplemente ni siquiera se dignan atender una llamada telefónica o contestar un mensaje. Y eso que son profesionales en servicio al cliente. 

Los millones que se ahorrarían las empresas si practicaran la regla de oro de servicio al cliente de “atender al cliente como quisiéramos ser atendidos”. El problema es que como la respuesta es tan simple no puede ser que algo sea tan supremamente fácil, por lo tanto lo complicamos. De igual forma como en el artículo pasado hable de la pésima atención que recibí de casi todos los funcionarios de un importante banco, hoy quiero referirme a la experiencia que tuve en cierta ocasión que visite la central de abastos de mi ciudad Medellín. Como casi no conocía el lugar le pregunte a uno de los venteros ambulantes donde podía encontrar un artículo que estaba buscando. Luego de ofrecerme los dulces que estaba vendiendo me guio por varios minutos hasta llevarme al sitio exacto donde encontraría el artículo. ¿Qué es eso si no un buen servicio? ¿Qué necesidad tenía el joven de guiarme el mismo? Como vendedor ambulante conocía las gigantescas instalaciones de la central mayorista pero fue su actitud de servicio la que me impacto. 

Mientas caminábamos le pregunte que estudios tenía y me dijo que él y su familia habían tenido que huir de su tierra de miedo de la guerrilla, que él solo sabía leer y escribir pues no había tenido oportunidad de estudiar y según me dijo sonriendo, ni falta le hacía pues económicamente le iba muy bien y era muy feliz vendiendo sus dulces, además estaba pensando en montar un negocio para vender frutas al por mayor. Es de anotar que el joven no quedo satisfecho sino hasta que yo compre el artículo que necesitaba y fue el mismo el que recateo el precio. Al salir del lugar dijo “Es que vea doctor, cuando a ustedes los ven tan elegantes les cobran mucho más de lo que vale el articulo por eso me quede con usted porque sabía lo que iba a pasar”. Quise darle una propina al joven por sus servicios pero no la acepto, me dijo que si quería colaborarle comprándole algunos dulces me lo agradecía pero que no era necesario que le pagara por un servicio que él hacía con el mayor de los gustos. Obviamente le compre algunos dulces y el joven se retiró sonriendo agradecido, no sin antes darme el número de su teléfono celular para que lo llamara en caso que necesitara algo de la Central Mayorista de Medellín. 

¿Interesante verdad? En la pasada entrega comentaba el servicio que me habían brindado algunos funcionarios de un prestigioso banco, lo más probable es que todos habían cursado importantes estudios en renombradas academias. En cambio el joven con el cual me había encontrado en la central de abastos no tenía estudios pero si una actitud de servicio a toda prueba. ¿Cuál sería el futuro de los funcionarios de aquel banco y de ese vendedor de dulces? Muy diferente. Lo más probable es que los empleados de aquel prestigioso banco continuarían siendo empleados por muchos años, en cambio aquel joven seguiría el ejemplo de muchos comerciantes multimillonarios que no tienen estudios pero si muchos empleados muy estudiados al servicio de ellos. 

Para brindar un servicio de excelencia se debe tener ante todo ACTITUD DE SERVICIO. Por muchos estudios que una persona realice, por muchos títulos universitarios que tenga, por muchos cursos de servicio al cliente a los cuales haya asistido, si la persona no tiene actitud de servicio, difícilmente esos estudios le van a servir de algo. Hay personas que no hacen nada si no obtienen una contraprestación económica por sus servicios. En cambio hay otras que así no les paguen por hacer algo, lo hacen con el mayor de los gustos y quizás mejor que si les estuvieran pagando. Alguien dijo alguna vez que para triunfar en la vida se requiere de un 95% de actitud y un 5% de aptitud. 

Próxima entrega: Servicio al Cliente III: El vicio de servir.

jueves, 28 de octubre de 2021

Servicio al cliente I: Esa platica se perdió.

Por lo general siempre me gusta hablar de casos puntuales y de las cosas que solo a mí me pasan. Muchos de mis seguidores me escriben interesantes sugerencias y críticas a mi correo electrónico. Siendo reiterativa la crítica que mi forma de escribir es muy escuelera, demasiado práctica, simple y a veces demasiado directa. Aun no sé cómo interpretar esos comentarios, si como halagos o como “críticas constructivas” como suelen llamarlas algunos. Alguna vez tuve la oportunidad de preguntarle a un muy famoso escritor cuyo nombre quiero obviar porque lo que me escribió fue a nivel personal y no tengo autorización para divulgarlo: “… los críticos son personas que dicen saber mucho sobre lo que critican pero no saben hacer lo que critican. Señor Restrepo, si usted quiere ser un buen escritor, nunca someta sus escritos a la crítica pues no se puede dar gusto a todo el mundo, tendrá seguidores y también detractores, por lo tanto, guardando el debido respeto por todo y por todos, escriba para usted, porque si a usted le gusta lo que escribe, lo más probable es que a otros también les guste, nunca escriba por dinero, el dinero, si usted es un buen escritor, el dinero sera una de sus recompensas ya que la mayor recompensa es el reconocimiento por parte de sus lectores…”.

Siguiendo el consejo de ese gran hombre de las letras, hoy quiero escribir sobre una situación bien interesante. Hace poco debí visitar una de las sucursales de uno de los bancos más grandes de mi país Colombia cuyo nombre también quiero obviar para no herir susceptibilidades, además porque con esta maravilla o pesadilla del Internet, todo lo que uno publique queda disponible para que cualquier persona en cualquier parte del planeta pueda leerlo, así es que tratare de ser lo más educado posible.

Al ingresar al famoso banco me acerque a una hermosa joven que estaba muy entretenida con su teléfono celular pues no apartaba la vista de él. Sin mirarme dijo…


- A la orden señor.

Como aun no apartaba su mirada del celular espere a que terminara lo que estaba haciendo. Momentos después dejo su teléfono encima del escritorio y pregunto con cara de pocos amigos pues al parecer yo había interrumpido una conversación muy importante…

- Lo escucho señor – volvió a decirme la joven. 

Iba a responderle cuando se escuchó el sonido característico cuando ingresa un mensaje a un celular.

- Permítame un momento señor – dijo la joven cogiendo nuevamente su teléfono y mientras sonreía tecleo hábilmente un mensaje.

Como la joven seguía muy entretenida recibiendo y contestando mensajes en su celular me dedique a observarla. Realmente era una mujer muy hermosa, elegantemente vestida y el cargo que ocupaba posiblemente era la envidia de muchos compañeros. Pasaron algunos minutos antes de que la joven apartara su mirada del celular y volviera a prestarme atención.

- Ahora si dígame señor, ¿en qué puedo servirle? – me pregunto la joven mientras jugueteaba con su teléfono.

- Buenos días señorita, sería tan amable de…

No pude terminar la frase porque en ese momento se volvió a escuchar el sonido característico del teléfono cuando ingresa un mensaje. El caso es que no pude hablar con esa funcionaria del banco pues al parecer los mensajes que le estaban llegando a su móvil eran más importantes que yo, así es que salí de la oficina y busque a otra persona que me diera la información que necesitaba. Esa mañana recorrí casi todo el edificio de aquel banco ya que siempre me mandaban de un lugar a otro porque al parecer nadie sabía brindarme la información que estaba solicitando. Es de anotar que hable con diez personas, a nueve de ellas no les importaba ni les interesaba solucionar mi problema, para ellas la labor que realizaban era la más importante, yo simplemente los estaba distrayendo con mis tontas e inoportunas preguntas.

Lo curioso de todo es que por todas partes del edificio habían llamativos letreros donde se resaltaba la importancia del cliente. Hermosas fotografías de personas sonrientes que invitaban a utilizar los servicios y a adquirir los productos de la entidad bancaria. Como he sido algo inquieto con el tema del servicio al cliente me di a la tarea de investigar cuánto dinero invertía aquella prestigiosa empresa en capacitar a su personal. Una señora, ya entrada en años, que finalmente y muy amablemente resolvió mi inquietud, me comento que en los últimos años constantemente el banco utilizaba los servicios de renombrados entrenadores internacionales o coach como ahora rimbombantemente les dicen, para capacitar al personal, los cuales cobraban miles de dólares por sus servicios. Con un dejo de nostalgia en su voz, me dijo que a ella le había tocado vivir en ese banco tiempos mejores donde no había tanto entrenamiento pero si un gran sentido de pertenencia y de camaradería entre sus compañeros, muchos de los cuales ya se habían jubilado, algo de lo cual próximamente ella también disfrutaría.

Según me menciono, las cifras que la entidad bancaria invertía a nivel nacional e internacional en capacitación y en publicidad con el fin de atraer nuevos clientes, eran sencillamente asombrosas. Salí del banco preguntándome si los dueños o los altos directivos del banco se daban cuenta de lo que estaba pasando con el personal de servicio al cliente. Lo más probable es que no, debido a que por lo general se mantienen encerrados en sus oficinas o bunkers donde el contacto con el cliente común y silvestre no es muy común que digamos. 

La pregunta es ¿Qué tipo de capacitación recibe el personal de servicio al cliente? Es de anotar que todos los empleados de una empresa, independientemente la labor que realicen, son de servicio al cliente ya sea interno o externo. En las empresas, absolutamente todo el personal debe estar orientado y capacitado para brindar un servicio de excelencia. Infortunadamente como solemos decir en mi país Colombia “esa platica que se perdió”. Millones de dólares invertidos o mejor, gastados en “capacitación” se pierden porque a la hora de la verdad o como dicen actualmente en “los momentos de verdad” los resultados dejan mucho que desear.

Próxima entrega: Servicio al Cliente II: Actitud de servicio.

viernes, 24 de septiembre de 2021

Cuanto tienes, cuanto vales.



En mi país, Colombia, es una frase muy popular; con la cual se quiere expresar que valemos por las cosas materiales o el dinero que tenemos, de tal forma que si no poseemos nada pues simplemente no valemos nada, no somos nada, no representamos nada y los que si tienen algo miran por encima del hombro a los pobres “desventurados”.

Sin embargo amigo lector, permítame analizar desde la óptica del sentido común (haciendo un paréntesis les recomiendo mi libro Educar, con Sentido Común – Algo que comúnmente no hacemos padres de familia y maestros) este dicho o refrán popular.

Hoy en día todo es asegurable, cuantificable, medible y por supuesto valorizable y a lo que no se le pueda hacer este proceso, al parecer no existe. 

En este orden de ideas, analicemos entonces la veracidad de esa frase. ¿Cuanto valemos? Si tal y como papá Dios nos trajo al mundo nos miramos en un espejo veremos nuestra figura reflejada en el. Ahora bien, la idea no es comenzar a criticar la figura que vemos, lo obesos, lo flacos, lo desnutridos, lo negro, lo blanco, el lunar peludo que tenemos a un lado de la nariz, la celulitis, lo calvos que somos, esos gorditos que salen aquí y allá o cualquiera de las “deformidades” que físicamente tenemos.

Entre otras cosas, las sagradas escrituras dicen que, fuimos creados a imagen y semejanza de Dios (génesis 1:26) por lo tanto, cualesquiera sea nuestra figura, quiere decir que papá Dios también tiene gran cantidad de presentaciones, tamaños y diseños y si somos como somos, es porque Él, como energía creadora y conservadora del universo, quería que fuéramos como una de sus innumerables manifestaciones.

Así es amigo lector, que es el momento entonces de aceptarnos tal y como somos y dejar de criticarnos y tratarnos tan duramente. Pues, como lo dije antes, sea cual sea nuestra forma física, es una de las tantas manifestaciones de esa energía que es Dios o cualquiera sea el nombre que le quieras dar; yo por ejemplo siempre me refiero a Él como papá Dios. Bueno, pero como este libro no se trata de hablar de temas tan espinosos como los religiosos continuemos entonces analizando el tema de este capítulo. 

Las aseguradoras por ejemplo le tienen un valor a cada parte de nuestro cuerpo. De hecho hay personas que aseguran por mayor valor la parte del cuerpo que más utilizan. Tal y como lo afirma la columnista Gracia Terrón “…Al igual que existen seguros para proteger el coche, la casa, el yate o la mascota; en el mercado existen pólizas de seguros que ponen precio a las partes del cuerpo más valiosas para una persona. Los cantantes, los conferenciantes, los profesores y en general todas las personas que económicamente dependen de su voz, la aseguran; los escultores, aseguran sus manos, los deportistas, aseguran sus piernas. El futbolista David Beckham por ejemplo tiene aseguradas sus piernas en 40 millones de dólares y todo su cuerpo por 150 millones de dólares. El cantante Luis Miguel también tiene asegurada su voz y su cuerpo por 7,5 millones de dólares y Jennifer López sus piernas, en seis millones de euros. El objetivo de estas pólizas es proteger económicamente a sus titulares ante una posible pérdida de facultades físicas, a las que deben su fama y sus ingresos.

Las aseguradoras tienen unas tablas con distintas valoraciones en función de la parte del cuerpo de que se trate. Las manos, el cerebro, los ojos y las piernas suelen ser más valoradas que los dedos, las orejas, oídos y la nariz, por lo general. No obstante, existen casos específicos, en función de la profesión del asegurado, en los que la indemnización puede ser mayor. Por ejemplo, las pólizas firmadas por un músico, que necesita los oídos para desarrollar plenamente su profesión, o un enólogo, recibirían mayores indemnizaciones en caso de tener problemas con sus oídos o su nariz que un profesional de otra categoría…”

Estoy seguro que si nos ponemos a hacer cuentas sobre cada uno de los órganos y partes del cuerpo humano, todos ellos valdrían una verdadera fortuna. Un riñón por ejemplo en el mercado negro tiene un costo superior a los ¡diez mil dólares norteamericanos! Increíble pero cierto. 

En este orden de ideas queda desvirtuada entonces la frase “cuanto tienes, cuanto vales” porque desde que fuimos fecundados y aun antes, porque también se venden óvulos y esperma humano, somos multimillonarios, solo que como se dice en las finanzas, el 95% de los seres humanos estamos ilíquidos, pues literalmente nuestro cuerpo vale una fortuna, (sin contar las propiedades intelectuales que pueden valer mucho más que las físicas; algo así como las marcas, que pueden valer más que las plantas físicas de las empresas).

Llegara el día en que el mercado de órganos humanos deje de ser ilícito y se pueda vender o comprar cualquier órgano o parte del cuerpo ya sean originales, clonados o creados en laboratorios. Tal como hacen los bancos de semen actualmente.

Es un hecho que la trata de blancas o el comercio de seres humanos como exclavos a través de la historia, ha sido una constante y difícilmente terminara. Más aun cuando los valores y principios están en franca decadencia. 

Tal y como lo acabamos de ver, una cosa es que tengamos un valor y otra muy diferente que nos valoremos, que nos apreciemos y que como tal nos cuidemos dado nuestro incalculable valor. Curiosamente cuidamos más el carro que tenemos que el vehículo que es nuestro cuerpo.


lunes, 14 de diciembre de 2020

Si deseas justicia, se justo


Qué difícil es la empatía, el ponernos en el lugar del otro. Lo más fácil es criticar o juzgar a nuestros semejantes pero pocas veces nos ponemos a pensar y analizar porque piensan y actúan de determinada forma. En nuestros hogares, en el lugar de trabajo, en donde estemos, por lo general estamos criticando la forma como los demás hacen las cosas. Queremos que todos piensen y actúen como nosotros lo hacemos, independientemente si lo que estamos haciendo es bueno o malo. Queremos que los demás sean fiel copia nuestra, tal vez pensando que así podemos ejercer un mayor control sobre los demás.


Alguna vez le escuche a un famoso conferenciante que “el salario mínimo representaba el mínimo esfuerzo”. Respeto esa opinión pero no la comparto, ya que muchas personas realizan extenuantes labores y sin embargo no son retribuidas como merecen, y a veces, fuera de tener que realizar su labor, deben soportar los malos tratos o el asedio de sus jefes. Nada hay más deprimente que ver a un acaudalado empresario que goza de todos los lujos y comodidades que da el dinero pero que trata a sus empleados como esclavos desconociendo que son ellos los que lo han llevado a conseguir su fortuna. 

Uno de los factores que más causa pérdidas en las empresas es la alta rotación de personal. Teniendo en cuenta que la mayoría de las personas no se van de sus empleos, se van de sus jefes.

Recientemente un amigo me comento una situación. En el conjunto residencial donde él vive uno de los empleados renunció porque en otra empresa le pagaban un poco más que en la que estaba laborando. Analizada la situación se llegó a la conclusión que salía más barato subirle el sueldo y mejorarle las condiciones laborales a ese empleado que contratar uno nuevo ya que el proceso de capacitación y entrenamiento de una nueva persona es mucho más costoso. Eso sin tener en cuenta que el empleado llevaba varios años laborando en la empresa, realizaba una excelente labor, era una persona honrada y de absoluta confianza, algo difícil de encontrar en esta época. 

O cambiamos o nos cambian, por otro o por otra y por lo general siempre gana el mejor postor, el que mejores condiciones ofrezca. Es importante entonces evaluar el costo beneficio. Es necesario analizar detenidamente a que se debe la alta rotación de personal en nuestras empresas, la deserción escolar en nuestras academias, los divorcios, las migraciones, etc. etc. 

Si bien es cierto la retribución económica por la labor que realizamos es de vital importancia y de hecho por eso la hacemos, también es cierto que las condiciones laborales son de suma importancia y se cambia de hogar, de empresa, de ciudad o de país buscando precisamente mejores oportunidades, mejor calidad de vida. No en vano las grandes multinacionales están invirtiendo fuertes cantidades de dinero en hacer la vida laboral de sus empleados más llevadera. Reconocen que invertir en su gente es un excelente negocio. 

La pregunta es ¿Cuánto está invirtiendo usted en su gente? Recuerde que capacitar al personal puede ser costoso, no hacerlo es más costoso aún, es una de las principales causas de la quiebra de las empresas. De igual forma pienso que, cuando se paga el mínimo, se obtiene el mínimo esfuerzo ya que cuando se contrata a una persona no solo se contratan dos brazos sino que esos brazos están acompañados de una mente que puede generar mucho más dinero que esos brazos, si se tienen en cuenta las ideas que produce.

Alguien decía que se ha sacado más oro de la mente humana que de la misma tierra. Y es que cuando se paga con cacahuetes, son los monos los que trabajan. Las preguntas son: ¿El salario que usted paga es coherente con las exigencias laborales? ¿Lo que usted le esta exigiendo a su ser querido, está plenamente justificado? Recuerde que el inconformismo laboral o familiar es una bomba de tiempo que tarde que temprano explotara y lo hará en el momento más inoportuno.  

¿Cuántas veces los empresarios buscan fuera de sus empresas lo que tienen dentro? Personas que conocen las fortalezas y debilidades de la empresa y que saben exactamente qué hacer para superarlas pero que no son tenidas en cuenta ya sea porque no tienen la preparación académica, porque son muy jóvenes, porque son muy viejas o porque simplemente no tienen “el perfil” que se busca. 

Un caso similar se presenta en muchos países con la llamada fuga de cerebros. Científicos a los cuales no estimulan para realizar sus investigaciones y prefieren marcharse a otros países donde si son valorados y tenidos en cuenta. Ejemplos, los que usted quiera. Las grandes potencias les deben mucha parte de sus triunfos financieros y tecnológicos a personas que han venido de otros países. De igual forma sucede en nuestro entorno familiar y empresarial. Dejamos ir a nuestros “seres queridos” o a nuestros empleados por no dar el brazo a torcer, por no dialogar, por no negociar, por no ceder.
Vale la pena recordar la frase del director técnico de futbol Francisco Maturana cuando decía que “perder es ganar”. Posiblemente ese aumento de sueldo afecte el presupuesto de la empresa, pero le aseguro que lo que se gasta en capacitar a una nueva persona, tarde que temprano se verá reflejado en los estados financieros de la empresa porque muchas veces pasa que el nuevo empleado no se adapta a la empresa o la empresa a él y se debe comenzar otra vez en la búsqueda de la persona adecuada. 

Lo(a) invito pues a reflexionar un poco sobre mi blog. A pensar porque ese ser querido o empleado esta aburrido con usted y que le están ofreciendo en otra parte. A pensar lo que dice la canción “mama ¿qué será lo que quiere el negro?”. Se sorprenderá que muchas veces no es lo que usted piensa.





martes, 17 de noviembre de 2020

Insistir, persistir, resistir y NUNCA desistir


Se dice que quien nunca ha “fracasado” es porque nunca ha intentado hacer nada. Sin embargo muchos de los que han “fracasado”, que se han dado contra el muro, que han quedado con una mano atrás y otra adelante, muchas veces sucumben a esa terrible experiencia y toman decisiones tan drásticas como terminar con su vida, otros simplemente se hunden en sus recuerdos cuando eran prósperos y tenían todo lo que el dinero puede dar y se convierten en pobres vergonzantes, en drogadictos, alcohólicos o haciendo de su vida, la de su familia y amigos, un completo caos.

Millones de personas en la historia de la humanidad han pasado por situaciones personales y sociales que no quisieran volver a repetir, sin embargo, debido a lo que escribía en un blog anterior de que “estamos biencapacitados pero mal educados”, será una historia que se continuará repitiendo por cientos y quizás por miles de años hasta que nos demos cuenta que la violencia en todas sus manifestaciones, es un mal negocio y que puede llevar al exterminio de la misma raza humana. Es que la frase aquella que dice que “quien no conoce la historia está dispuesto a repetirla” no es del todo cierta, ya que conocemos la historia y continuamos repitiéndola una y otra vez, para la muestra, un botón, las guerras que buscan la paz - nada más contradictorio - cuando en realidad lo que buscan es demostrar el poder en todas sus manifestaciones.

En este blog no quiero hablar de esas tristes y decadentes formas de pensar de una minoría que convierte la vida de la mayoría en un verdadero infierno, al punto de poner en serio peligro la estabilidad de nuestra casa, el planeta tierra.  Hoy quiero escribir, basado en mi experiencia personal  de haber “fracasado” en la salud, el dinero, el amor o la espiritualidad y en lo interesante que es convertir nuestros “fracasos” en extraordinarias experiencias de vida. Se preguntará usted amable lector por qué escribo fracaso entre comillas. Por la sencilla razón que pienso que no existen los fracasos, existen experiencias, exámenes que la vida nos hace, muchos de las cuales no ganamos y debemos repetir una y otra vez la lección hasta aprenderla, la mayoría de las veces a la fuerza.

Para un enfermo existe un momento decisivo en la difícil situación que vive y es cuando entra en crisis; o se alivia o se muere. De igual forma, cuando en nuestra vida se generan esas crisis que pensamos no vamos a poder superar, es quizás el mejor momento que podemos vivir ya que las crisis si no se dan por si solas, necesariamente hay que propiciarlas pues  muchas veces pensamos que todo está bien, cuando en realidad nuestra vida se asemeja a una bomba de tiempo que puede explotar en cualquier momento generando infelicidad,  destrucción y muerte.

Es necesario entonces hacer un alto en el camino y evaluar si lo que estamos haciendo realmente nos produce felicidad o solo lo hacemos por aparentar algo que no somos o porque nos hemos conformado con lo poco o lo mucho que tenemos. 

Si la conclusión a tu reflexión es que realmente eres feliz en todo el sentido de la palabra, ¡excelente! Si por el contrario te das cuenta que estas viviendo una vida que no es la quieres vivir, es el momento de cambiar de estrategia, pues como decía el científico Albert Einstein, “es de tontos esperar resultados diferentes y continuar haciendo lo mismo”.

Le invito pues a tomar la decisión y ponerse en acción, si realmente quiere lograr el objetivo principal de todo ser humano que es ser feliz. Le anticipo que no será una tarea fácil, nada que valga la pena lo es. Sin embargo si insiste, persiste, resiste y NUNCA desiste hasta hacer realidad sus sueños y despertar de una vez por todas de sus pesadillas, se que lo va a lograr.  Un proverbio oriental afirma que “para dar una larga caminada, hay que comenzar con el primer paso” y ese trascendental paso que usted debe dar es saber dónde está y dónde quiere llegar, porque "el que no sabe para donde va, ya llego".


viernes, 30 de octubre de 2020

Matando la serpiente por la cola.

Diariamente vemos y escuchamos en todos los medios de comunicación lo que los humanos hacemos para autodestruirnos, poniendo en riesgo al planeta entero y todo lo que en él existe.

Curiosamente sabemos cómo contrarrestar esa situación, pero ni nuestros antepasados hicieron nada y tampoco nosotros lo estamos haciendo. Es como si los pronósticos realizados por los científicos sobre el calentamiento global debido a la contaminación y a todas las demás plagas que afectan a los que vivimos en esta nave espacial llamada tierra, fueran mentiras.

Los “homo sapiens” (hombre sabio), supuestamente los seres más inteligentes que existen en el planeta; que deberíamos ser los guardianes, protectores y cuidadores de nuestra casa el planeta tierra, no lo hacemos. El futuro entonces es incierto, ya que por muchas leyes que se creen, es seguir matando la serpiente por la cola.

¿Cuál es la solución entonces a todos los males que aquejan a la humanidad y por ende al planeta tierra? Solo hay una, educar y capacitar a las futuras generaciones en torno al respeto a todo y a todos. Mientras no nos respetemos a nosotros mismos y a todo lo que nos rodea, todo seguirá igual. Una frase atribuida al científico Albert Einstein dice que “Es de tontos esperar resultados diferentes y seguir haciendo lo mismo”.

Si REALMENTE queremos que el futuro sea diferente, necesariamente debemos comenzar por aceptar que las anteriores, la actual y las próximas generaciones están seriamente contaminadas por la violencia en todas sus manifestaciones, a la cual tristemente nos hemos acostumbrado tanto, que la consideramos como algo normal. 
 
Hasta que no aceptemos esa realidad, difícilmente vamos a cambiar nuestra forma de pensar y de actuar. Es necesario que aceptemos que estamos enfermos, que somos adictos a la violencia y que muy probablemente alguna parte de nuestro ADN está dañado, ya que no es normal que pensemos y actuemos de una forma tan irracional. Claro que mientras pensemos que el dinero lo hace todo, haremos todo por dinero. 

Tan pronto aceptemos esa triste realidad, se comenzará a gestar un cambio que puede tardar tanto como lo que lleva la raza humana en este planeta. Acelerar ese proceso de cambio depende de nosotros, de tomar conciencia que el futuro depende solo de nosotros y que por lo tanto es indispensable cambiar los sistemas educativos que existen actualmente, ya que está comprobado que no funcionan, pues las cárceles del planeta están llenas de personas que mínimo saben leer y escribir y un gran porcentaje de ellas han cursado estudios superiores y ni que hablar de los delincuentes y criminales de cuello blanco que gracias a sus conocimientos y fortunas evaden una justicia tan corrupta como ellos mismos.

Sin temor a equivocarme, creo firmemente que mientras no eduquemos a las próximas generaciones (si es que las hay) en principios y valores, el futuro de la humanidad, del planeta tierra y de los que lleguemos a colonizar, es bastante incierto.